miércoles, 27 de abril de 2011

Agenda Cultural Intensa


Cargada, muy cargada viene la agenda cultural y de otro género para los próximos días. Para mí tiene especial importancia la Feria Agroganadera, porque no solamente me gusta y disfruto, sino que necesito una buena vara de medir para mi ganado, para comparar y comprar algún semental (que nos hace falta). Toda la ganadería me apasiona, pero especialmente las especies que menos tenemos en la comarca. La variedad de vacuno y sus características son sorprendentes, y cada año vienen de distintas regiones (la gallega, la oscense, las de Ávila, etc.), imponiendose más variedades en la tierra. Vero se vuelve loca comparando producciones y sus potencialidades, y yo me quedo en la superficie con el trapío y el cuerpo del ganado. Luego mi padre decide. Además de la Feria, tenemos conferencias en Pozoblanco; Charlas sobre energía, jornadas de historia..., las fiestas y romerías de varios pueblos, etc. Además de las cruces a la vuelta de la esquina.., el botellón del fin de semana y un sinfín de cosas más. No sé si dará el tiempo para tanto, pero se hará lo que se pueda.

sábado, 23 de abril de 2011

Día del Libro


La abrumadora agenda de Semana Santa y el trabajo diario han dejado casi en un rincón al día del libro, aunque los medios de comunicación le han dado la correspondiente parcela de protagonismo. Para mí sigue siendo esencial que se promueva la lectura y que leamos, porque es la base del lenguaje y de la Cultura. Este año, como los últimos, la promoción y las noticias de los libros vienen asociadas al debate sobre los libros digitales. Es un tema que se trata de soslayo, pero que tiene bastante trascendencia a mi parecer; tal vez se le de aún simplemente una lectura superficial, un tanto anecdótica, pero muy pronto va a cambiar nuestro mundo. De momento, hasta las estadísticas se muestran reacias hacia el invento, subrayando que no parece mucha la incidencia sobre la población y sus preferencias (en términos generales). Creo sinceramente que este es debate es un tanto baladí, porque el futuro viene firme y la tecnología se impone, queramoslo o no. A mi me gusta leer, y sentir el peso del libro, el tacto diferente que tienen las ediciones, las letras, el formato, tampaño etc. Ya sé que es una cuestión cargada de romanticismo, y que se tiene que acabar por razones que todos sabemos: cuestión de peso, de dinero, de eficacia, de tiempo, de mil verdades que no cabe negar. La tecnología nos facilita ya lectores sin peso, sin gasto ocular (como antes decían), con memorias de caballo para llevar cientos de libros; con las letras que tú quieras y el tamaño que mejor te venga. Con el aliciente de las ilustraciones, documentación de autor, contexto, etc., etc. En un recoveco de tu maleta o de tu casa puedes guardar los grandes tesoros de la humanidad; en los viajes viene de maravilla tener a mano cualquier obra de cualquier tiempo; las editoriales te facilitan las últimas novedades a un costo ínfimo..., e incluso tú puedes hacer literatura creativa con cuatro ejercicios que te facilitan para convertirte en un buen escritor. Más claro agua. El romanticismo de la lectura tradicional (aunque me pese) tiene sus días contados, y no podrá competir con el bichito electrónico por mucho tiempo. El tema de las editoriales y promotoras (que se mueven por dinero) me suscita ciertas dudas, pero al igual que los DVD, películas, etc. (de internet) tendrá que encontrar nuevos senderos para obtener beneficios. Cada vez es más acuciante el mundo de la producción literaria en la red, y los monopolios editoriales solo venden barbaridades a costa de la manipulación mediatica de los medios (Tv, famosos, autores de reconocido prestigio, etc.), no por las calidades de los escritores). Un mundo más diverso y menos mediatizado avanzará sin duda por los derroteros del pluralismo, y eso está más en relación con el formato digital. Ja..., Ja, Que ingenua soy..., como si de pronto el Mundo fuera más culto, más selectivo y menos manipulable. Veremos que dicen los tiempos..., de momento..., yo vislumbro al bichito grandes posibilidades. Y me molesta, porque soy lectora tradicional(bueno, le pongo pasión y disfruto).

jueves, 21 de abril de 2011

III Jornadas de Historia en Villanueva del Duque


Las Jornadas se desarrollarán con el siguiente Programa y Ponentes según nos indican.

lunes, 11 de abril de 2011

Calostros

Un día de estos me pongo a promocionar la vaqueriza y sus cosas, porque no todo va a ser jamón. El otro día pude comprobar con unos visitantes de Juani -que me los llevé a casa- que sus intereses discurren por derroteros bien distintos a los que yo pensaba. Ingenuamente creía que les iba a obnubilar con los avances técnicos (las ordeñadoras automáticas) y las estadísticas..., la musiquilla de Beethoven y la selección de piensos bien distribuida para los bóvidos. Pues no. Resulta que tuve que ordeñar a "Maika" (una de mis vacas) a mano porque tiene algo de mamitis (esa leche no se incorpora a depósito, claro)y los chavales se emocionaron con eso..., y querían ellos hacerlo...,¡Y ya no me la dejaban de mano!Después vieron los padres, (por casualidad) un tazón de calostros recién ordeñados y eso fue cosa bendita. Había que verlos como le gustaban, admirándose de las diferentes texturas que tenían de los distintos días en distintos cuencos; y le tuve que dar las correspondientes explicaciones. Estoy convencida de que están perdidas las esencias de nuestra cultura gandera y agrícola en las grandes ciudades, porque no se explica tal ignorancia de cosas tan esenciales. Cuando se lo explicaban a Juani parecía que hubieran visto una cosa extraordinaria; un extraterrestre o algo así. Ahora entiendo la importancia que tienen las granjas que se dedican a explicar a niños las actividades fundamentales del ganado y del campo.

jueves, 7 de abril de 2011

Igualdad de Género, ja, ja, ja...


Hace poco vi anunciar un curso de la Mancomunidad sobre la igualdad de género, que estaba además patrocinado por la Diputación. Me hacen reír estas cosas, por no llorar, porque ponen bien a las claras la situación de nuestra cultura machista; y la postura cínica de las instituciones. Resulta que quieren enseñarnos con un cursillo (al que no fui, lógicamente), y a diario promueven con los medios de comunicación (que los ven y oyen millones de personas) la cultura machista abominable. Resulta que ayer vi -y no lo había hecho nunca con anterioridad, y tal vez sea mala suerte- un programa en Canal Sur sobre una iniciativa de famosos ante el toreo. Resulta que a las aprendizas eran dos mujeres (una modelo, me parece; y otra presentadora, también me parece, porque estoy pez en esto de la televisión)las trataban como a tontitas de circo: Ellas eran las cobardes y atolondradas; las miedicas sin valor (esos sí con buenas figuras y porte para mirarlas y tocarlas); ellos los machos valientes, los que saben y no tienen miedo, pero (mira por donde) ellas eran las que se tenían que poner delante de las vaquillas, salvo los toreros profesionales, que lógicamente tienen ya perdido el miedo y es su profesión. Podían haber puesto, digo yo, alguno de los chavalillos (que no fueran toreros) a ver como les iba con eso del miedo. Porque parecía una calificación clara de la mujer en sentido negativo; cuando además las chiquillas eran valientes a más no poder, porque con bastante poca adaptación le dieron pases y se sobreponían muy bien del miedo. No sé si fue un programa puntual en este sentido, pero vergonzoso por todos sus poros; y no solamente por el tratamiento de la mujer ante el toreo (para demostrar su incapacidad, según ellos), sino por la infinidad de gestos en que las mujeres eran utilizadas con un tratamiento machista. Ellos dando lecciones, manoseando, etc. Me gustaría que les hubieran puesto un simple ejercicio de periodismo, de escritura o cualquier otra cosa, porque realmente eran (y son) analfabetos..., aunque se decían muy maestros...Es bochornoso que se utilice de esta manera a la mujer en medios con tantísima difusión para denigrarla y considerarla simplemente objeto de feria. Y luego..., que vengan los cursos de igualdad de género. La verdad es que mucha culpa la tenemos las mujeres por prestarnos a ese juego imbécil con esas cartas marcadas. Vamos..., vamos.

miércoles, 6 de abril de 2011

¿Qué es lo mejor de Los Pedroches?

Casi nada, el interrogante se las trae. Así me lo planteaba esta mañana de sopetón Juani en su cortijo, que adaba liada con eso de la promoción por internet (Casa rural). La cosa tiene enjundia, y me he puesto a reflexionar sobre ello en plan doméstico, claro. El sabio buscador de google dice a bote pronto que el jamón, que es el mejor del mundo, y eso deja un saborete importante hasta en el cerebro. Es una verdad que es poco discutible, y tal vez sirva de marketing momentáneo, pero no sé si será realmente eso un puntal fundamental para defender los valores de nuestra tierra. El jamón es bueno, pero jamones hay muchos por todas partes, y ahí tenemos bien cerca a Extremadura, a Jabugo, a Guijuelo (que tiene marca hasta con el nuestro), etc. La verdad es que tal vez lo esencial de nuestros pueblos y su historia se substancie ahí, porque de la ganadería hemos vivivo y seguimos viviendo; ahí enraiza nuestra cultura y nuestra economía..., y tal vez el comercio expansivo y el comercio, y el turismo tengan que encontrar por ahí su hueco. Mis dudas me surgen, sobre todo, porque tal vez sea un motivo un tanto reducido para suscitar el atractivo de la comarca. Tal vez debamos asentar otros valores para realzar conjuntamente, porque el tema (aunque sea bueno y verdadero) puede resultar manido. La pregunta sería, ¿Qué es lo que más provocaría o incitaría a visitar nuestra tierra a gentes de San Sebastián, de Coruña, de Teruel, de Cataluña, de París o Marsella, de Londres (que vinieran a Córdoba)? ¿el carácter singular de nuestros pueblos? ¿Paquirri y la Plaza de Toros? ¿El Auto del Viso o el Halcón de Belalcázar? Es una buena cuestión para meditar, y a Juani aún no le he dado la respuesta; pero creo que un paso previo sería (y hay que hacerlo) hacer un tanteo en internet a personas de distintas geografías para ver a qué le suenan los Pedroches.

sábado, 2 de abril de 2011

Qué poco nos conocemos


Es una verdad como un templo. Ayer lo pensaba cuando fui por algunos asuntillos de las vacas a varios pueblos. A veces tengo la sensación -que creo que es cosa cierta- de que nuestra comarca y los pueblos Los Pedroches tienen muy poco que ver con esa otra imagen que se inventa y difunde de mil maneras. Cuanta mentira..., cuanta superchería revestida de modernidad y cuán lejos de la realidad se encuentra a menudo la realidad y esa imagen que tenemos de nuestra tierra. No lo digo con maldad alguna, pero creo que existe una distancia considerable entre ese concepto de unidad comarcal, como entidad enteriza geográfica y cultural,y esa verdad de gentes rurales de nuestros pueblos a veces tan separadas y distantes (más allá de cuatro relaciones económicas y de mercado); entre la verdad de nuestras relaciones personales (a veces muy distantes, estando al lado), nuestros vínculos comerciales y sociales a pie de calle; o los intereses políticos más viscerales (no los de los políticos de escaparate de cada pueblo, aunque tengan la legitimidad de las urnas). Creo que la comarca, en lo más hondo de su ser, no se conoce ni proyecta en las guías ni está siquiera en nuestras mentes: Porque nos hemos fabricado una estampa que muy poco tiene que ver con lo que somos y lo que fuimos. Y no hablo solamente del pasado. En lo cultural es muy estridente la distancia, y múcho más sobre las reconstrucciones tradicionales que se hacen. A diario digerimos con agrado platos prefabricados de fiestas y tradiciones que nos consuelan (a mí, difícilmente) de esa pérdida grosera de nuestras esencias. Tal vez haya que consentir que eso es lo único que puede quedar (Porque los tiempos pasan y en el pasado no se vive), pero realmente no es más que un plato amanerado de una verdad disfrazada (dícese una mentira bien compuesta). Las ferias y fiestas, exposiciones..., y esa elevada nómina de tradiciones, no son más que un triste remedo de un impulso institucionalizado para alegrarnos los oídos y la vista. Una panorámica edulcorada (en lo positivo y en lo negativo también) más de ese Reivival de todos los pueblos (en cualquier parte de Andalucía y España) enlatada y envuelta en papel de celofán trasparente. Mi reflexión, no obstante, no enfoca hacia ese pasado irrecuperable, sino a esa percepción de que (én lo que aún existe, en formas de vida, estilos, tradiciones, formas de ser, etc.)pululan dos comarcas (una la real y otra la prefabricada) a la par, que se me antojan no coincidentes. Tal vez sea una simple apreciación mía, pero la comarca verdadera se palpa en la vida cotidiana (sobre todo yo que estoy constantemente en el marco más rural y tradicional, el ganadero), en el trasiego diario de Añora y Belalcázar, de Dos Torres y Conquista..., en los problemas , en las ilusiones y frustraciones de uno y otro pueblo. Tantas veces se nos uniforma e identifica de la misma manera que llama mucho la atención; porque yo encuentro grandes diferencias en formas y contenidos entre los de cada sitio (por lo menos en mi trabajo) que me hacen pensar mucho. Cada pueblo es un mundo en sus formas económicas y tradiciones, tratos, hablas y estilos..., pero cuando asisto a las ferias y recuperaciones embotelladas me pregunto, ¿Es que hace falta que nos monten estas pantomimas, cuando hay rasgos aún más que sobrados de nuestras formas de vida? Pienso que ignorar las esencias (aunque sea por desconocimiento, que pienso que lo tenemos) es muy peligroso, porque al final ignoramos y olvidamos lo verdadero. Dando como ciertos cuatro registros rurales que muy poco dicen de unos y otros pueblos en términos diferenciales. Nos montamos una película y nos la acabamos creyendo. Es complicado expresar lo que pienso (y lo lamento de veras)..., pero repito que se me ha suscitado cuando la percepción real (la que pateo día a día) de la comarca no coincide mucho con ese imaginario que se proyecta (de lo que leo y veo; de lo que se proyecta que somos y fuimos). Sinceramente pienso que hemos globalizado un tanto el concepto de comarca y sus rasgos (sobre todo por los medios de comunicación, las instituciones, etc.), que se nos ha olvidado que existe aún una comarca distinta, con pueblos, formas de vida y sentires diferentes que desgraciadamente no conocemos, o nos pasan inadvertidos. Parece mentira que el otro día me hiciera pensar en ello Sebastián en el pago de las ovejuelas, cuando me decía sobre las referencias comarcales (de la visión de la prensa,el mundo rural, los intelectuales, etc.): "esos viven en otro mundo". Y es cierto...Hay que descubrir la comarca paso a paso, golpe a golpe (que diría el poeta) ..., pero nosotros mismos.

QUE PARE EL TREN EN LOS PEDROCHES

QUE PARE EL TREN EN LOS PEDROCHES
Vista Parcial de la Manifestación en la Estación de Villanueva