Feliz Año Nuevo 2011

Ya está aquí el nuevo año. Felicitar a todos el Año Nuevo es quizás la frase más manida, pero de verdad os deseo a todos que entremos con nuestros mejores deseos. Creo que todos y cada uno de nosotros debemos no solamente felicitarnos, sino hacer todo lo que esté en nuestras manos para facilitar la convivencia a los demás. Desear, sí, pero también poner nuestro empeño en mejorar y corregir errores; en mirar la vida con el mayor de los optimismos y no ver siempre la botella medio vacía. Las cosas salen mejor cuando deseamos que vayan enderezadas, cuando ponemos de nuestra parte un granito de arena y todos los demás hacen lo propio. Debemos aplicarnos el cuento en lo personal, en el entorno más próximo y en lo más lejano. A fin de cuentas, la vida la construimos nosotros y solo nosotros..., y si realmente queremos podemos caminar con mayor optimismo,avanzar y progresar, mirar en positivo y ayudar más y mejor a cuantos nos necesitan. Es tarea de todos. Feliz Año 2011, que seguro que nos dejará para la comarca grandes cambios que ya se vislumbran. Soñar..., es el primer paso para conseguir grandes realidades.

Navidad a la vuelta de la esquina

Ya tenemos la Navidad a la vuelta de la esquina. Todos nuestros pueblos están ornados con hermosos elementos de época para ese periplo navideño y dar la bienvenida al nuevo año. Muy pronto disfrutaremos del solaz de unos días cargados de romanticismo. No sé si la Paz que se pregona y los buenos deseos, pero sí que se produce cierta laxitud sobre la tensión cotidiana. La vida se ve de otra manera y el espíritu, en general, se conmueve con buenos deseos para todos. La crisis seguirá siendo la crisis, los políticos seguirán siendo políticos y nosotros igualmente con nuestras bondades y maldades inherentes..., pero la atmósfera vital es un tanto distinta (o así la veo yo); y aunque sea un tanto superfluo y comercial, veremos la vida con otros ojos (o la queremos y deseamos ver). Las luces y esperpentos navideños son a veces un exceso (que debíeramos moderar), pero también representan un mundo de ilusión, la alegría de días distintos y algo de lo más hondo (y bueno) del ser humano que se proyecta en formas de alegría. No sé, pero vale la pena ser un poco optimistas ante tanta tristeza cotidiana, ante los malos augurios económicos, ante el horizonte poco claro...Tal vez si todos lo deseamos el mundo pueda cambiar un poco hacia formas más satisfactorias, hacia situaciones de mayor bonanza, hacia hombres más íntegros. Nuestra comarca también está inserta en todas estas dicotomías llenas de contrariedades políticas, económicas y de distinta índole, pero los distintos actos navideños nos harán soñar y vivir..., reflexionar y postular deseos para cambiar a mejor, para progresar y vivir mejor. Mis felicitaciones a todos en estas fechas navideñas.

Qué Frío y otras cosas

Estamos ya en diciembre y hace lo que tiene que hacer: frío. Esta mañana hemos alcanzada temperaturas bajas de cierta consideración y respeto, y parece que esta noche irá por los mismos derroteros. Tampoco en la comarca existen novedades de cierto relieve, porque las máximas eventualidades se ciernen en la sempiterna política, que es veta más ampliamente explotadala en la mayoría de los blogs y páginas de nuestra tierra. Algunas notas sobre las inminentes actividades de navidad y la descollante acogida que ha tenido la película Entre lobos. El otro día la ví y me pasó como a otros que la habían comentado: el paisaje como el valor fundamental, y la línea argumental un poco sobredimensionada. Lo importante es que se pueda difundir en alguna forma nuestro potencial paisajístico, no la lectura de hechos rancios de la España obscura. En las cuestiones de la promoción turística es muy importante enfocar bien lo que se quiere proyectar. La Junta de Andalucía no anda desatinada (y no soy foroza para nada de...)cuando propone campañas que reorientan la mirada de los visitantes hacia otras perspectivas (además de la tradición, tópicos, etc.). En Los Pedroches nos pasa lo mismo, habría que hacer un esfuerzo por elevar otros valores de modernidad, que seguro que los hay, pero siempre nos aferramos a cuestiones muy manidas. Pocas veces veo impulsar actividades científicas, de astronomía, de instrumentos novedosos, de gente joven, iniciativas de informática y tecnología, etc. Tampoco las instituciones promueven (ayuntamientos, diputación, etc.) enfoques distintos. Habría que hacer un concurso de ideas para innovar en la comarca, para proyectar también nuestra mirada hacia adelante. En ocasiones comprobamos como una comarca o una ciudad se hace famosa por un simple enfoque innovador, un museo distinto, una convocatoria extravagante pero interesante, un avance tectnológico sobre alguna cuestión. En sanidad, en alimentación, en ganadería, en educación, en urganismo y limpieza, en miles de cosas que se pueden apuntalar novedades. En Pozoblanco, por ejemplo (por eso de que ahora acabo de venir), ¿no sería buena idea que se convirtiera en una Ciudad completamente peatonal? Porque a todos los sitios se puede ir fácilmente andando, y se podía definir un espacio completamente limpio de coches. ¿es tan difícil? En cuestiones informáticas, ¿no se podría hacer en todos Los Pedroches un campus informatizado con mayor fluidez de comunicación, con intercambios de novedades, con recursos tecnológicos para empresas foráneas...? etc, etc.

Naturaleza Viva en Los Pedroches

Esta es la auténtica Cultura de nuestra comarca, la naturaleza en carne viva. Más allá de mediocridades de otro tipo, el tiempo se presta hoy (al menos) con posibilidades para disfrutar del gran espectáculo de nuestro entorno, de los paisajes, pueblos y vecindades. Aquí no tenemos problemas para encontrar posibilidades y recursos, porque son muchos los recovecos que podemos elegir para disfrutar del campo: del llano y de la sierra, del ajetreo y del silencio, la tierra y el agua, el aire y la luz. Ahí está todo a muy pocos kilómetros para andar con despacio, oliendo y mirando, sintiendo el latir de la vida en su estado puro. Esta mañana he dudado entre varias posibilidades para el fin de semana, porque ahí está el Cuzna y sus derrotes impresionantes, que siempre guardan además la vibración histórica de sus leyendas y vestigios históricos; el Horcajo y sus romanticismos de ruinas que silencian mucho pasado; de Conquista hasta el pantano con aire puro a borbonones; y el alto de la Chimorra y su contorno, que le tengo ganas; también en el Yeguas y sus moliendas se pasa una buena jornada, y no digamos en al límite del Zujar llegando a la Alcantarilla, que se pierde en la noche de los tiempos su belleza; hasta lo más próximo me resulta bello, porque también es hermoso y callado el recorrido de mi pueblo a Villanueva, y disfruto como nadie hasta yendo por el camino viejo.Y para los amantes de los castillos ahí está Miramontes, Alcocer, Bioque, El Castillejo. Hay tiempo y ganas, pues a disfrutar. Lo que más me gusta, el parloteo de los mayores, que siempre saben más del campo que toda la escuela de agrónomos junta. Hay que ver como entienden de sementeras en ciernes y calidades de la tierra, del tempero y sus cambios, de agostaderos y baldíos trasnochados; los pasos antiguos y los vaqueriles buenos de las dehesas. La mitad y un cuarto quisiera saber yo que Sebastián el de Torrecampo, o Niceto de Fuente la Lancha, y mira que tienen cuatro rastrojos, que no son más. Cuando te metes en materia sientes (parece mentira) la mayor decepción del mundo de lo poco que sabemos ya del ganado y de la tierra. Porque la verdadera Cultura de nuestra comarca se está perdiendo...y ¡ay, que los tiempos cambian! que me decía en otro día el tío Feliciano en Villaralto. A disfrutar...

La Cultura de Enhorabuena

Algunos eventos de los últimos días nos ofrecen motivos de alegría. No por la farándula en este caso, sino por el trabajo que se plasma en algunas obras: me refiero en concreto a la publicación del trabajo de las monjas de Pozoblanco en Belalcázar de José Luis González peralbo; la publicación anual de la Revista Cuzna de los Institutos de la comarca; y el premio Molina Ricardo a Alejandro López Andrada. Son aportaciones a nuestra cultura y a diferentes aspectos de nuestra tierra, y debemos sentirnos con por ello satisfechos, porque no solamente proyectan un esfuerzo de sus autores, sino que nos dejan en mayor o menor medida algo del bagaje de nuestros antepasados. Vamos, de nosotros mismos. Enhorabuena a todos ellos.